martes, 30 de abril de 2024

Desangeladas

Abril, segundo mes de campañas presidenciales desangeladas. Ellas y él hablan desde una realidad alterna, acorde con un proceso que está decidido, tal como ocurría en el siglo pasado. Solicitar el voto ciudadano, invocar al pueblo, son actos superfluos cuando de antemano intereses superiores se han alineado para hacer de la jornada electoral por venir un trámite. Intereses prepotentes por los que nadie ha sido llamado a votar. Candidatos, ideologías y partidos supeditados a los intereses decisores de grupos financieros, grandes empresas, mass media, corporaciones gremiales prácticamente están arregladas. Las excepciones son la confirmación del consenso elitista. El gobierno de izquierda resulto bastante amigable con esos intereses superiores.

Increíble que las campañas presidenciales no se hayan dispuesto, en algún momento, como caja de resonancia para replicar la denuncia sobre la destrucción y el genocidio en la Franja de Gaza que lleva seis meses ejecutándose de manera ininterrumpida por parte del Estado israelí. Ese silencio los hace iguales. Se dirá que se trata de un conflicto fuera de nuestras fronteras, que no compete a México. Pero el silencio dice mucho de la calidad humana, sobre todo para la que se declara humanista, también para la que se dice católica. Si no alzan la voz para condenar al ejército de Israel ha de ser porque obedecen a intereses superiores.

Las víctimas infantiles  de los ataques de Israel contra la Franja de Gaza. (Ahmed Alarini - Agencia Anadolu)

Ni con los lamentables asuntos domésticos como la desaparición de personas y los feminicidios se han escuchados planteamientos de sensible profundidad acerca de un desgarramiento de familias que llegó con el neoliberalismo. Todo se diluye en un vaivén de ataques y defensas personales. Será acaso que reconocen de facto al crimen organizado como un interés superior.

Lo que hayan dicho los candidatos sobre la inseguridad no conmueve el escepticismo que agobia a la población. Lo notorio son las insuficientes capacidades institucionales para reducir la impunidad y la violencia criminales. Hay una especie de adaptación negativa a los malvados. La ley es impotente, la moral no se encuentra en su mejor momento cuando de la expansión delictiva se trata. ¡Silencio! Es la orden en el vecindario rural o urbano, rico, pobre o de medio pelo. La vida es una ruleta rusa.

Existe una pedagogía del dinero en aleación con la violencia que está arrasando con la educación formal, con la enseñanza religiosa. Delinquir se ha vuelto moda. Gobernadoras y gobernadores tienen el pulso de la actividad delictiva de alto impacto en sus respectivos estados y podrían ofrecer un mejor apoyo. No es así pues se escudan en la norma que los excluye porque se trata de crímenes del fuero federal. La jerarquía eclesiástica mantiene diálogo con los líderes del CO sin que se modifique el estado de cosas. Los jueces parecen amenazados o sobornados por la delincuencia al dictar con prontitud liberaciones a modo legaloide. A todo esto, se suma el gobierno de la república al descabezar el equipo original de atención a las víctimas de la violencia que lo acompañó al inicio de la actual administración.

Estamos en los locos años veinte del siglo XXI.

No hay comentarios.:

Powered By Blogger