Barbarie, fue la expresión usada
en este espacio cuando se difundieron las primeras noticias de los abominables
sucesos del 26 y 27 de septiembre de 2014, ocurridos en Iguala, Guerrero (http://tonalpohualli-rodmigster.blogspot.mx/2014/09/barbarie-la-vuelta.html).
Inculpaciones, exculpaciones, van
y vienen. Nadie se quiere hacer cargo de una investigación en manos de
políticos que revuelven lo acontecido. De lo informado hasta ahora, se
mantienen los datos de una acción policíaca desproporcionada e injustificable
de parte de agentes municipales, pertenecientes a un gobierno local totalmente
capturado por el crimen organizado. Seis muertos, veintidós heridos, 43
desaparecidos y 10 fosas clandestinas descubiertas. Más allá de las
averiguaciones e implicaciones judiciales, la represión en contra de los
estudiantes de la normal de Ayotzinapa ha terminado por golpear a la clase
política en su conjunto.
El 6 de octubre, el presidente
Enrique Peña Nieto convocó a una conferencia de prensa en la que fue su propio
vocero. Por primera vez en esta administración, que yo recuerde, el aquí y
ahora presidencial habló con indignación. Los enunciados melifluos acerca de
las reformas estructurales no fueron requeridos, la cruda realidad política de
un sistema que no ha cambiado silenció el himno a la transformación peñista.
Efecto Ayotzinapa que le marca un nuevo inicio al sexenio.
Iguala cambió la “normalidad” del
intercambio político y dio lugar a un inesperado juego, los costos ocultos del
Pacto por México. Las estructuras reformadas al gusto de las grandes
corporaciones empresariales se cimbran dentro del marco de un sistema que no se
transformó. Jamás se detuvieron por explicar que entendían por estructura y su
derivación en adjetivo. Ignorando los límites de las reformas dentro de un
sistema inconmovible.
El sistema se ha encargado de
ajustar las estructuras reformadas para ponerlas en un horizonte de bajo rendimiento.
Esto es así porque el sistema requisita negativamente para su funcionamiento –para
sus flujos de información- de una justicia deficitaria, de privilegios que
profundizan desigualdades sociales, que opere con manga ancha la impunidad, al
margen del derecho.
En lo que va del año, al menos
cinco temas en los medios han dado cuenta de esta operación del sistema: La
contaminación del Río Sonora por el derrame de residuos industriales vertidos
al cauce por la corporación minera Grupo México; operaciones fraudulentas de la
empresa Oceanografía y el Grupo Banamex en las prestación de servicios navieros
a Pemex; el desgraciado ajusticiamiento de 22 jóvenes por parte del Ejército en
el municipio de Tlatlaya, estado de México; la captura del capo Héctor Beltrán Leyva
y con él, su prestador de servicios financieros, el empresario Germán Goyeneche, militante del partido verde ecologista;
quinto y malo, la sangrienta represión en la ciudad de Iguala.
Cambio estructural que no
modifica patrones sistémicos no es un verdadero cambio.