Medio año de gobierno de Felipe Calderón, cumplido el martes pasado. Sin una muestra contundente de la legitimación a través del gobierno. La mejor carta, la lucha contra el narcotráfico, fue sacudida por una emboscada en Carácuaro, Michoacán (De acuerdo con el comunicado de Sedena) Lugar donde a las últimas horas de la noche del día primero fueron acribillados cinco militares por una partida de encapuchados que siguen sin identificar.
Cuando comenzó la acción gubernamental de la presente administración se suponía trabajo de inteligencia detrás de la acción. En contraste con lo hecho por el gobierno anterior, se veía una decisión que estuvo ausente por seis años. La autoridad dispuesta a recuperar territorios en manos del crimen organizado. Seis meses después y la guerra se bate en el pantano formado por una avalancha de ejecuciones.
La apuesta de la delincuencia se ha elevado cuando recién Calderón había anunciado la segunda etapa en esta guerra que se cargó sobre las espaldas de los militares, sin un balance crítico de lo hecho por Fox, incluso se dio continuidad a personajes que tuvieron que ver con este combate en la pasada administración. Algo no está funcionando. El publicitado número dos de Los Pinos, ya no a de querer que ni lo mencionen con tal atributo, pues la pregunta que hace el público es ¿Número dos para qué? El destapador, Francisco Ramírez Acuña, en su calidad de encargado de la Secretaría de Gobernación, se ve impotente sin el instrumental pleno para conducir la política interior.
Media año de gobierno y estamos como el primer día, con manifestación en las calles. Algo no está funcionando en el gabinete social, mal puesto como extensión del aparato partidista de Acción Nacional. Por tal motivo, el PRI muestra señales, amagos, de dar por terminado su acompañamiento al gobierno de Calderón si sus colaboradores del gabinete no se aplican a lo que su despacho les exige.
La protesta contra la Ley de Issste, causa principal de las movilizaciones y destacada reforma lograda en los primeros meses de ejercicio, pone a prueba la fortaleza del respaldo de Elba Esther Gordillo, líder del Magisterio, pues buena parte de la movilización está integrada por trabajadores de su gremio y si no controla sus trabajadores, con que cara sale cada que puede a los medios para exhibir la factura que le firmó Calderón por sus servicios profesionales en el rubro de la operación electoral. En nada le ayuda a su amigo ¿Socio? Felipe Calderón. Ella, junto con la titular de Educación, Josefina Vázquez Mota, tienen mucho trabajo este mes de mayo y algo tienen que hacer.
Medio año de gobierno y la inercia de la ineptitud institucionalizada por el foxismo sigue campeando. Algo no está funcionando y la investigación sobre malos manejos de PEMEX no se puede limitar a chivos expiatorios, debe ser a fondo. El ajuste del gabinete es previsible, máxime cuando los pronósticos sobre el desempeño de la economía apuntan hacia la reducción de las expectativas de crecimiento. No se cuenta con bono democrático y la sociedad no aguanta seis años más de aprendizaje, para ello debe hacerse pública la revisión del país que le dejaron al presidente Calderón, que no precisamente está contenida en la Auditoría Superior de la Federación. No se vale querer descargar la incompetencia en el adversario. De Fox decían que el PRI no lo dejaba gobernar, ahora ya se insinúa la especie de que el Frente Amplio Progresista y López Obrador no dejan gobernar a Felipe Calderón. No le hagan ese flaco favor.
Cuando comenzó la acción gubernamental de la presente administración se suponía trabajo de inteligencia detrás de la acción. En contraste con lo hecho por el gobierno anterior, se veía una decisión que estuvo ausente por seis años. La autoridad dispuesta a recuperar territorios en manos del crimen organizado. Seis meses después y la guerra se bate en el pantano formado por una avalancha de ejecuciones.
La apuesta de la delincuencia se ha elevado cuando recién Calderón había anunciado la segunda etapa en esta guerra que se cargó sobre las espaldas de los militares, sin un balance crítico de lo hecho por Fox, incluso se dio continuidad a personajes que tuvieron que ver con este combate en la pasada administración. Algo no está funcionando. El publicitado número dos de Los Pinos, ya no a de querer que ni lo mencionen con tal atributo, pues la pregunta que hace el público es ¿Número dos para qué? El destapador, Francisco Ramírez Acuña, en su calidad de encargado de la Secretaría de Gobernación, se ve impotente sin el instrumental pleno para conducir la política interior.
Media año de gobierno y estamos como el primer día, con manifestación en las calles. Algo no está funcionando en el gabinete social, mal puesto como extensión del aparato partidista de Acción Nacional. Por tal motivo, el PRI muestra señales, amagos, de dar por terminado su acompañamiento al gobierno de Calderón si sus colaboradores del gabinete no se aplican a lo que su despacho les exige.
La protesta contra la Ley de Issste, causa principal de las movilizaciones y destacada reforma lograda en los primeros meses de ejercicio, pone a prueba la fortaleza del respaldo de Elba Esther Gordillo, líder del Magisterio, pues buena parte de la movilización está integrada por trabajadores de su gremio y si no controla sus trabajadores, con que cara sale cada que puede a los medios para exhibir la factura que le firmó Calderón por sus servicios profesionales en el rubro de la operación electoral. En nada le ayuda a su amigo ¿Socio? Felipe Calderón. Ella, junto con la titular de Educación, Josefina Vázquez Mota, tienen mucho trabajo este mes de mayo y algo tienen que hacer.
Medio año de gobierno y la inercia de la ineptitud institucionalizada por el foxismo sigue campeando. Algo no está funcionando y la investigación sobre malos manejos de PEMEX no se puede limitar a chivos expiatorios, debe ser a fondo. El ajuste del gabinete es previsible, máxime cuando los pronósticos sobre el desempeño de la economía apuntan hacia la reducción de las expectativas de crecimiento. No se cuenta con bono democrático y la sociedad no aguanta seis años más de aprendizaje, para ello debe hacerse pública la revisión del país que le dejaron al presidente Calderón, que no precisamente está contenida en la Auditoría Superior de la Federación. No se vale querer descargar la incompetencia en el adversario. De Fox decían que el PRI no lo dejaba gobernar, ahora ya se insinúa la especie de que el Frente Amplio Progresista y López Obrador no dejan gobernar a Felipe Calderón. No le hagan ese flaco favor.