jueves, 22 de agosto de 2013

Histeria y desinformación


Esa manera de ofrecer noticias, portadora de la indignación de la “buena”. A falta de explicaciones promueven el linchamiento. Ese estilo histérico de desinformar.

Es preferible que el periodista reconozca “Esto está muy enredado” (Martha Anaya) Así como se aprecia el esfuerzo periodístico de dar voz a algunas de las partes (La mañana de hoy con Carmen Aristegui) O dar rienda suelta a la narrativa del conflicto desde uno de sus orígenes (Carlos Ramírez)

¡Oh paradoja! Los medios liberados de la tutela del gobierno regresan a las técnicas del linchamiento de otras épocas. Acaso los grandes consorcios de la comunicación les conviene esa forma de informar. Sus intereses los hace iguales.

Hagamos el despeje, dicho sin alusión.

El núcleo formal del diferendo es una reforma educativa lanzada por el gobierno que no previó la consulta a los maestros.

El núcleo real es la ruptura de un arreglo en el que el gobierno en turno solicitaba apoyo político al gremio a costa de la calidad educativa. Arreglo que llegó a la ignominia con Vicente Fox y Felipe Calderón. No olvidemos que éste último se ganó a pulso el calificativo de ilegítimo por el trasiego de votos (2006) que operó a su favor Elba Esther Gordillo. Sabemos dónde está ahora la señora.
Entonces llega a mi auxilio el olvidado cuestionamiento reyesheroliano sin resolver ¿Los sindicatos están hechos para la lucha económica o la lucha política? Consultar a Lenin, por lo menos.

Uno quiere entender qué está pasando, propósito contrario al de un sector de los medios y, por qué no, del mismo gobierno.

Cómo solucionar este conflicto donde, por un lado, el gobierno ofrece una reforma educativa orientada hacia el futuro, descuidando por completo una explicación de lo ocurrido en el país en los últimos años. Llamar a cuentas, si se quiere de manera poética, a quienes teniendo responsabilidades no hicieron lo obligado.

Caería muy bien a un país que busca la esquiva modernidad, en un entorno libre y soberano, hacer un recuento de la educación en México que no se redujera a cifras carentes de prosa. Abrir un foro en el que participaran responsables sobrevivientes. Quiero ver discutiendo sobre el tema a Porfirio Muñoz Ledo, Manuel Bartlett Díaz, Ernesto Zedillo, Mario Limón, Reyes Tamez y Josefina Vázquez, para poder hacer la edición completa de la película y no quedar con los fragmentos del día. Que nos digan qué pasó ayer. Conocer la historia detrás de las cámaras. Una base para entender lo que está pasando.

Pero no, lo que ofrecen muchos medios es “información” para el agrado de la burguesía y la clase media recalcitrante. Para esos a quienes la modernidad no les ha dado respuesta al cuestionamiento que les aflige ¿Qué hacer con los nacos? Que no la encuentren porque acabaremos en el nazismo.

No hay comentarios.:

Powered By Blogger